Los derechos de autor, es decir, el copyright es una de las grandes barreras legales y económicas que protegen a las obras intelectuales más allá del ámbito puramente de autoría y respeto a la misma. Actualmente suponen un ataque frontal a la libertad de expresión y difusión, con la conivencia de los partidos e instituciones políticas. Desde Europa y España, nuevas leyes van modificar el panorama de modo que los ciudadanos sean no sólo acusado de delicuentes, sino que puedan ser perseguidos y penados, por actividades como el intercambio de archivos mediante programas P2P o por realizar una copia privada, además se promoverá aún más la invasión de la privacidad de los usuarios de Internet.

Con  todo esto me estoy refiriendo, por un lado, a la Directiva para la Aplicación de los Derechos de Propiedad Intelectual e Industrial (IPRED2, 2005/0127 (COD), cuya votación está prevista para el 26 de Abril. Ese mismo día, el Consejo de Telecomunicaciones y el gobierno estudiarán la aprobación de un borrador de Ley sobre la Protección de la Propiedad Intelectual en Internet, que podría suponer una compensación por la exclusión del artículo 17 bis en LISI.

Ante la gravedad de los hechos sólo dos organizaciones están defendiendo los intereses de los usuarios y ciudadanos, en Europa esta responsabilidad corre a cargo de la Electronic Frontier Fundation (EFF):

From the Internet to the iPod, technologies are transforming our society and empowering us as speakers, citizens, creators, and consumers. When our freedoms in the networked world come under attack, the Electronic Frontier Foundation (EFF) is the first line of defense. EFF broke new ground when it was founded in 1990 — well before the Internet was on most people's radar — and continues to confront cutting-edge issues defending free speech, privacy, innovation, and consumer rights today. From the beginning, EFF has championed the public interest in every critical battle affecting digital rights.

EFF is a donor-funded nonprofit and depends on your support to continue successfully defending your digital rights. Litigation is particularly expensive; because two-thirds of our budget comes from individual donors, every contribution is critical to helping EFF fight —and win—more cases.

Mientras en España corre a cargo de la Asociación de Internautas, definida así en su acta fundacional:

1. Constituir la Asociación de la Asociación de Internautas , con Domicilio social principal en la Calle Telémaco, 12 1º 9 de la ciudad de Madrid (28027) cuyos fines serán, de acuerdo con el art. 51 de la Constitución, la defensa de los derechos de los usuarios telefónicos y telemáticos, por constituir servicios de uso común, ordinario y generalizado, así como la asistencia a los poderes públicos en las cuestiones que puedan afectar a aquéllos; y, en especial, fomentará el establecimiento de una tarifa plana para las comunicaciones telefónicas de Internet.